Joer, ¡respuestas!. Emulando a Don Vito Corleone... "Vienes a mí,... y me pides respuestas... Cómo te atreves siquiera a pedir respuestas a algo que no las tiene..."
Si es que es un tema que nos quiebra los cascos a la mayoría. Yo tengo unos valores muy arraigados.
Para mí los valores son esas normas que cuándo uno lleva a rajatabla le garantizan dormir a pata suelta.
Si en algo he acertado, voy a partir de que háblamos de una posible infidelidad.
Yo tendría en cuenta antes de nada, valorar a mi pareja.
Qué tipo de persona es. Sé que me quiere. El que le engañara, ¿le haría daño en el corazón o sólo en el ego? ¿Me respeta, me quiere, me valora, o me tiene como un mueble?.
Valorando eso sabría si a mí me haría daño engañarle o no. Porque lo que está claro es que si le engañara, JAMAS, bajo ningún concepto, querría sufrir la tentación de confesárselo después. ¡Eso nunca!. Entonces, tendría que saber a ciencia cierta que es una carga que puedo llevar yo sólo.
Si no se lo merece y siempre ha sido bueno, si le quiero y sé que me quiere, quizá falta pasión, sea una etapa, y se merece hacer lo posible para intentar solucionarlo.
Supóngamos que del juicio sale mal parado y se merece más cuernos que un saco de caracoles, pues entonces valoraría al que me "levanta pasiones".
Tiene en su contra que ya le conozco y que ya sé de qué pie cojea. Y si en su momento la historia no tuvo final feliz, es más que probable que no sea más que un reflejo de la parte buena de la historia que hubo, lo que yo veo y que me atrae.
Y en esa parte es cuando tienes que decidir si prefieres perdértelo y no sufrir posibles decepciones, o tirar para adelante, con dos ....
Osea que lo dicho, ... respuesta... ¡ni idea!. (Pues mas que ayudar, pa mi que la he liao

)