Va de perdedores, grandes perdedores. Un mensaje de estímulo para todos los que luchan a pesar de todo y un golpe bajo a nuestra sociedad y los valores establecidos. Una crítica a la sociedad Americana por quien mejor se ríe de si mismos que son ellos precisamente. Donde la moraleja podría ser el triunfo de la bondad y de las relaciones interpersonales por encima de cualquier otra meta.
Todo esto contado con gracia, con ritmo. Dos directores casi desconocidos arropando a Greg Kinnear (mejor imposible) , Toni Collette (El sexto sentido) y genial la niña Abigail Bresnin, en un corto reparto de seis actores.
Cine Independiente Americano para ver.
El que quiera, claro.
