
Sukkwan island. David Vann.
La cosa empezó por hojear el cómic.
Miré en internet y leí alguna crítica.
Y entre anoche y hoy por la mañana lo he acabado.
El libro en el que se basa el cómic, digo.
Curioso libro muy en la onda de la escritura tremendista norteamericana, esa recreación en lo sórdido propia de los Cormacs y los abuelitos Faulkners, a los que les han salido alumnos.
Frases cortas, tajantes, y un relato que avanza a base de sensaciones.
Que me lo haya leído de un tirón quiere decir que me ha gustado, cosa que no me esperaba.
A ratos, a ratos, me recordaba leyendo la piel fría, del catalino este, el Piñol, que tanto me gustó; me lo recordó por lo extraño, que no por la calidad: el del español (perdón, catalán), es mucho mejor.
Pero sí que uno pasa un rato curioso leyendo con éste. Recomendable, y voy a ver si me pillo alguno más de este interesante autor.