Cada loco con su tema, de modo que me veo incapaz de reflejar un monstruo.
La idea que me inspira un monstruo es un recuerdo imborrable; algo hay que se queda en tu consciente e inconsciente, una imagen que te resulta irresistible.
Así, mis monstruos han sido eróticos. Debido a mi edad la aparición de mujeres en bikini constituyó el no va más del erotismo; en un mundo pacato, absorbido por la religión, la deslumbrante aparición de ciertos cuerpos fue algo impactante. Y sospecho que el mismo miedo que podía darte Drácula lo provocaba la visión desbordante de algunas mujeres que en los 60´constituyeron toda una revolución.
Hay dos de ellas que me resultan inolvidables en bikini. Una tercera, anterior en el tiempo pero imposible de ver en España hasta muy tarde, fue, sin bikini, la cumbre de la sensualidad. Con sangre española, Rita Cansino se conviritió en Rita Hayworth y ciertas escenas de su "Gilda" las he visto centenares de veces, embobado y enamorado

En bikini hay dos que deshicieron mi organismo, me trituraron al punto de que hubiera hecho lo que ellas quisieran del mismo modo que el horror provocado por algún monstruo me hubiera obligado a hacer lo que él quisiera:
La Andress, saliendo del mar para terminar cayendo en los brazos de Bond, James Bond

Y Raquel Welch, especialmente en "Hace un millón de años", pero en cualquier caso, en cualquier momento, de cualquier manera...
